En la entrada anterior ya os hablaba del frío que empezaba a hacer y que tenía miedo del tiempo tan diferente que iba a vivir. Pues bien, ya está haciendo un frió de "tres pares de narices", como diría mi madre. Y el otro día una chica me advirtió, después de decirme que era loca por venirme a vivir a Inglaterra siendo de España, que en febrero es mucho peor. Pero nada, eso con unos cuantos bailes se quita toda la tontería ;) Eso sí, me seguirá sorprendiendo lo poco abrigada que va la gente a cualquier lado, ¡es que las chicas van incluso sin medias y los chicos en pantalón corto! Según me ha dicho hoy un taxista al traerme a casa, "los ingleses quieren enseñar su cuerpo" Pues yo sólo digo una cosa, algún día lo enseñaran azul del frío que van a tener y se convertirá en moda y todo el mundo querrá ser azul. Yo lo veo, "pitufos everywhere"
Cosas aparte de las tradiciones de los jóvenes, y no tan jóvenes, ingleses; voy a comentar mis aventuras de hoy. No sé si el título os ha dado una pista de lo que voy a hablar, pero creo que no os lo voy a decir, que lo vais a descubrir leyendo las aventuras. Todas tendrán el mismo tema común, pero en algunas seré más participe que en otras. Así que, ¿preparados? :)
La llamada más extraña de mi vida.
Ese día me tocaba el turno de mañana por lo que a esas horas hay más llamadas que podría haber durante la noche, aunque todo depende de lo poco que duerma la gente. Pues bien, serían como las diez de la mañana y cogí el teléfono diciendo la frase que ya tan bien me sé de memoria. (Que si ahora tuviera que decirla en español me sería difícil) Al terminar de hablar no se escuchaba nada al otro lado de la línea, sólo un ruido muy raro. Hablé de nuevo, pensando que no me había entendido, y os voy a citar lo que oí: "Ohhh yeah, ohhh yeah. Keep talking, oh yeah. Thank you" (Oh yeah, oh yeah. Continua hablando, oh yeah. Gracias) Y colgó. Mi cara después de esa llamada fue todo un poema. Creo que no tengo que decir nada más y creo que podréis adivinar lo que pretendía este hombre. Creo que el gracias lo dijo porque había resultado ser una mujer la que cogía el teléfono. ¿Qué habría pasado si hubiera sido un hombre? O a lo mejor ya había hecho llamadas en las que un hombre cogía el teléfono y por eso me dijo gracias. De todas formas, la llamada más "disguisting" de mi vida.
No conocer todas las palabras en inglés te lleva a pasar vergüenza y hacer pasar vergüenza.
Los clientes siempre acaban preguntando de todo tipo de preguntas en un hotel, hay algunas mucho más sencillas y comunes y hay algunas otras más difíciles y comprometidas. Pues como lo divertido es lo nonsense, que ya os he hablado de ellos; mi pregunta combinó comprometimiento y nonsense, una mezcla explosiva. Un hombre acababa de hacer el check-in, pero a los 10 minutos llamó a recepción porque parece ser que no había una toalla de ducha en su habitación. Por lo que, cogiendo una toalla del armario, me dispuse a llevarsela. Cuando se la dejé y después de realizar los formalismos correctos, me preguntó si tenía el teléfono de una palabra que no entendía muy bien lo que era; pero a lo que supuse sería un restaurante o una tienda. Le dije que si, que no habría ningún problema. El volvió a repetir la pregunta un poco sorprendido, pero yo le respondí que lo buscaría en google para darle el teléfono de lo que buscaba. Volvió a repetir la pregunta, pero está vez cambió un poco la forma de decirlo y ya entendí que quería decir que lo que buscaba no era un restaurante sino el teléfono de algo. Como no entendía lo que me quería decir, y quería buscar bien en google lo que me pedía, pregunté el significado de la palabra "escort"; que era la que no entendía. El cliente se puso un poco rojo y bajando la mirada me dijo: "Mujeres con las que tener sexo" Yo me puse más colorada que él y murmurando que creía que eso no lo podía encontrar en google me fui a la recepción muerta de risa a contarlo a mi compañera. Creo que nunca olvidaré esa palabra.
Pues bien, estas han sido mis aventuras de hoy. La verdad, no es que sean unas aventuras muy positivas, pero este blog es un nonsense continuo y estas aventuras no podía dejarlas atrás. La última me hace mucha gracia, porque aún me acuerdo de la pobre vergüenza que tuvo que pasar el hombre porque no conocía la palabra, creo que se acordará de mi toda la vida =P
Ya pronto llega la Navidad y todo está super bonito adornado. Además hay un mercado navideño que dicen que es de lo más bonitos por esta zona y tengo muchas ganas de verlo. Y la semana que viene me voy a Londres de vacaciones e iré al 50 aniversario de Doctor Who. Así que puede que la siguiente aventura sea esa o puede que no, nunca se sabe conmigo.
Besos a montones.
